La plaza de toros de Santamaría, la más antigua y la de mayor categoría en la historia taurina de Colombia, abre este domingo su tradicional temporada taurina que congregará a las principales figuras del toreo en el ruedo de la capital colombiana.
Enrique Ponce, El Juli, Andrés Roca Rey y Sebastián Castella conforman el póker de ases que encabeza la programación de tres tardes.
El número de festejos es más reducido frente a otras oportunidades, debido al escaso tiempo que tuvo la Corporación Taurina de Bogotá para organizar la temporada, tras el prolongado tiempo que se tomó la administración local para adjudicar el coso.
“Aquí lo más importante es mantener en alto la bandera de la libertad que implica la continuidad de los toros en la Santamaría, una tradición tan arraigada en Bogotá, junto a Madrid y Ciudad de México, las tres plazas más emblemáticas del planeta taurino, como que son las únicas donde se confirma alternativa”, dijo a Efe el presidente de la Corporación Taurina de Bogotá, Juan Bernardo Caicedo.
Los festejos tendrán sello propio. El primero, este domingo, con la participación de El Juli, un infaltable en la Santamaría, quien alternará con el peruano Andrés Roca Rey, triunfador en este mismo albero en sus últimas comparecencias, y el colombiano Luis Bolívar, número uno del escalafón nacional.
Los toros serán de la ganadería del propio Caicedo.
El domingo 17, el turno será para el hierro de Mondoñedo, legendaria dehesa de la familia Sanz de Santamaría, cuyo fundador, Ignacio, edificó en los años 30, de su propio capital, la plaza de toros.
Los españoles Fernando Robleño y Octavio Chacón y el colombiano Juan de Castilla se las verán con los toros que pastan en la Sabana de Bogotá.
Y el 24 de febrero, en corrida goyesca que tendrá además pintura y ópera como telón de fondo, actuarán el español Enrique Ponce, el francés Sebastián Castella y el colombiano Ramsés, con toros del hierro Ernesto Gutiérrez Arango, criados en las estribaciones del Nevado del Ruiz, informa Efe.
“La venta de abonos, que pasó de 800 a 2.000 entre el año anterior y el actual, más las solicitudes de reservas tanto del público de la capital como de otras ciudades, e incluso de países vecinos, nos hace presagiar masivas asistencias”, sostuvo Caicedo, quien tiene como propósito alcanzar diez tardes anuales de toros en un escenario que, además, es monumento nacional.