Un niño de 14 años falleció y su hermana está hospitalizada en Barranquilla tras resultar intoxicados con un purgante que su padre compró a un vendedor ambulante en las calles de la capital del Atlántico.
El hombre aseguró que buscaban mejorar el apetito del menor de edad y por este motivo compró dicho medicamento, “no pensamos que lo estábamos perjudicando de esta manera, quisimos fortalecer que subiera su apetito, los familiares me decían que lo veían débil, que le compráramos vitaminas”, afirmó Pedro Bulevar, en diálogo con Cablenoticias.
Fue tal el daño que empezó reflejar el menor que en cuestión de horas los médicos del Hospital le informaron al padre que su hijo presentaba daño multiorgánico y que tenía muerte cerebral, su hermana presentó los mismos síntomas pero fue atendida a tiempo.
El producto de nombre ‘Quenopodio’ se consigue en las calles de Barranquilla a un bajo costo y quienes lo comercializan dicen que sirve como purgante y de alivio para distintas enfermedades.
En medio de lágrimas su padre le envía un mensaje a las autoridades para que tomen control sobre la comercialización de este producto y se tomen las medidas pertinentes sobre el mismo, ya que es de fácil acceso para la población de la ciudad.
A continuación el informe completo:
