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La emergencia nacional ocasionada por el COVID-19, tiene como uno de los sectores con mayores calamidades sanitarias y de bioseguridad al contexto carcelario, donde se ven involucrados los centenares de presos de la libertad, guardias de custodia, e inclusive los familiares de los anteriormente mencionados.
Según el último reporte entregado por el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC), en los centros penitenciarios del país se han detectado 213 casos confirmados de coronavirus entre reos y guardias, dejando a tres víctimas mortales, por lo menos siete penales en emergencia y como caso más alarmante, a la cárcel de Villavicencio.
Frente a este último establecimiento carcelario de la capital del Meta, el senador del Polo Democrático, Iván Cepeda, se pronunció a través de sus redes sociales criticando las gestiones que ha tenido el Gobierno Nacional sobre esta cárcel, donde se encuentran confirmados cerca de 200 contagiados por el virus.
“Ayer dije que ante la mirada indolente del Gobierno Nacional la cárcel de Villavicencio se está convirtiendo en un cementerio. Corrijo: en realidad se está convirtiendo en una fosa común”, expresó el congresista a través de un trino.
Por su parte, desde diferentes grupos organizados de presos se han extendido las peticiones al INPEC y a la ministra de Justicia, Margarita Cabello, para que modifiquen el decreto sobre la excarcelación en el país, pues muchos de ellos consideran que lo que se ha estipulado no es suficientemente ajustado para mejorar la calamidad de hacinamiento que se vive en muchos de los penales.
