Luego de un mes de perpetrado el atentado a la Escuela General Santander en Bogotá que dejó 22 cadetes muertos, así van las investigaciones para dar con los responsables del carro bomba que explotó el pasado 17 de enero.
La primera captura por los hechos fue la de Ricardo Carvajal, quien afirmó en exclusiva con Cablenoticias que era inocente de lo que se le acusaba, que no hacía parte del Eln como lo señalaban las autoridades, y que los elementos como overoles y manual de iniciación encontrados en su casa hacían parte de su labor como voluntario en los Bomberos.
La segunda captura fue la de Wilson Arévalo, el hombre que al parecer fue quien condujo la camioneta Nissan Patrol desde Arauca hacia Bogotá para hacerle entrega del vehículo a José Aldemar Rojas, el supuesto explosivista de la guerrilla que entró el carro bomba a la Escuela y lo detonó en la mañana de aquel jueves cerca de los dormitorios de mujeres cuando se realizaba un evento de condecoración.
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Sin embargo, para la Fiscalía y el Ministerio de Defensa, hay todavía varias capturas que realizar en medio de este caso, como las de los motociclistas que supuestamente escoltaron a la camioneta desde la bodega al sur de Bogotá donde al parecer fue preparada hasta cuadras antes de la institución, aunque hace algunas semanas un joven que sería uno de los conductores de estas motos se presentó a las autoridades y salió en libertad tras no ser encontrado responsable de algún vínculo con el atentado terrorista.
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También la de una supuesta mujer, quien al parecer acompaño a Arévalo o alias “Chaco” desde Arauca hasta Bogotá para traer la camioneta con la que se cometió el ataque, información que aún es preliminar.
