El oleoducto Caño Limón-Coveñas sufrió un nuevo ataque con explosivos, el noveno contra esa tubería en lo que va de este año, que provocó un derrame de crudo pese a que el bombeo se encontraba suspendido, informó Ecopetrol.
El atentado, que no provocó víctimas fatales ni heridos, se registró en zona rural del municipio de Saravena, en el departamento de Arauca, precisó un comunicado de la empresa, que activó un plan de contingencia para contener los daños.
Inmediatamente Ecopetrol no atribuyó a ningún grupo armado ilegal el ataque contra la tubería, de 773 kilómetros de longitud con capacidad para transportar hasta 210.000 barriles diarios de crudo.
Pero las autoridades militares acusan de la mayoría de los atentados a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (Eln), que acostumbra a atacar la infraestructura petrolera en protesta por lo que denomina injerencia de empresas multinacionales en el país y mantiene un conflicto armado en contra del Estado desde hace más de cinco décadas, informa Reuters.
“El ataque produjo rotura del oleoducto con derrame de crudo, el cual quedó contenido en el cráter y en los alrededores del mismo”, reportó la petrolera.
