El internacional danés Christian Eriksen, que sufrió un paro cardíaco durante un partido de la pasada Eurocopa, aseguró este martes que quiere volver por “amor” al fútbol y que quiere estar con Dinamarca en el próximo Mundial.
“Mi objetivo es ir al Mundial de Catar”, aseguró el jugador a la televisión pública danesa DR en su primera entrevista tras el grave incidente sufrido en junio durante el Dinamarca-Finlandia.
Eriksen resaltó su deseo de volver a las canchas y que los médicos le han dado “luz verde” después de que se haya hecho todas las pruebas posibles y no haya sufrido ningún percance nuevo.
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“Creo que es el amor por jugar al fútbol. ¿Me puedo ver a mí mismo sin fútbol cuando sé que los médicos dicen que estoy bien? Entonces nada en mi interior me dice que no tengo que jugar”, afirmó en el adelanto de una entrevista que será difundida este jueves.
El “diez” de Dinamarca aseguró no tener miedo a que pueda sufrir un incidente similar en el futuro.
“De ninguna manera, ni por asomo. Al principio, tenía cuidado pensando en cuánto podía aguantar mi corazón tras lo ocurrido. Pero ahora siento que me han hecho tantas pruebas como era posible, así que no, no tengo ningún miedo a que pueda ocurrir otra vez”, dijo.
El exjugador del Inter de Milán se mostró agradecido por las muestras de cariño recibidas en estos meses.
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“No es que yo quisiera que la gente me enviara flores porque estuve muerto cinco minutos. Pero fue muy especial. Fue tan agradable, y me ha ayudado tantos buenos deseos que me han llegado en este tiempo. Incluso ahora hay gente que me sigue escribiendo”, afirmó a la DR.
Eriksen reiteró el agradecimiento a sus compañeros y a los médicos por ser “rapidísimos” en darle los primeros auxilios sobre el césped antes de ser reanimado.
Eriksen, de 29 años, se desplomó solo durante el partido contra Finlandia de la Eurocopa en Copenhague, y días después se le implantó un desfibrilador, dispositivo contraindicado para la práctica del fútbol profesional en Italia, lo que provocó que rescindiera su contrato con el Inter hace unas semanas. EFE