El Páramo de Sumapaz y el Parque Natural Chiribiquete podrían generar efectos negativos irreparables en caso de no ser atendidos con la prioridad necesaria.
El aumento en la temperatura en zonas montañosas como el páramo de Sumapaz y la reducción de lluvias en el Parque Natural Chiribiquete son algunos de los efectos que podrían ocasionar la crisis climática y la deforestación en Colombia, dos factores que ponen en riesgo áreas naturales claves del país.
Así lo asegura el más reciente informe de la organización ambiental WWF Colombia, que señala que el agua, la pesca, la estabilidad de los suelos y su productividad se verán afectados debido a la crisis climática, sumado a la deforestación y malas prácticas como la quema de los bosques.
Esto ha hecho “más sensibles los ecosistemas, afectando varios de los beneficios que las comunidades reciben del resto de la naturaleza“, alerta el documento, que analizó durante dos años las áreas claves de Colombia.
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Estos enclaves de alta importancia para el país lo son por su presencia de diversos ecosistemas que van desde alto andino hasta la selva amazónica y que conectan con la presencia de comunidades indígenas y campesinas.
En este sentido, Melisa Abud, experta en biodiversidad y cambio global de WWF Colombia, apremió la necesidad de “desarrollar estrategias de adaptación y mejores prácticas de producción” para conservar las fuentes de agua y mantener la conectividad de los bosques para que estos sigan brindando bienestar y salud a la fauna, flora y seres humanos en un panorama de clima cambiante“.
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Frente a estos riesgos que presentan tanto la crisis climática como la deforestación en Colombia, el informe lanzó tres recomendaciones para las autoridades locales y nacionales relacionadas con la capacidad de adaptación desprendida de Planes de Gestión del Riesgo de Desastres, así como la instauración de sistemas productivos sostenibles por medio de la zonificación de amenazas climáticas.
Por último, aconseja aumentar la conectividad del bosque y recuperar sistemas degradados estratégicos, acompañado de procesos de ordenamiento territorial que incluyan el clima cambiante como una amenaza.
EFE