El gobierno reveló que tiene expectativas positivas ante las reuniones con la delegación del ELN
Las delegaciones del Gobierno de Colombia y de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) designadas para el diálogo de paz se reunirán este martes en Caracas por segundo día consecutivo con “expectativas positivas”, adelantaron los involucrados en estas conversaciones a medios estatales de Venezuela.
“Nosotros tenemos expectativas positivas (…) vamos a hacer los máximos esfuerzos por avanzar en los cambios de Colombia y, por tanto, en la paz”, dijo al canal estatal VTV Víctor Cubides, alias “Aureliano Carbonell”, miembro de la delegación del ELN.
Explicó que la declaración conjunta emitida el día de ayer muestra la confianza mutua que se logró en esa primera sesión y “marca una ruta” de trabajo, a la vez que “manda un mensaje positivo” en la búsqueda de la pacificación.
Durante la mañana de hoy, señaló Cubides, las partes sostuvieron reuniones bilaterales con la delegación de Naciones Unidas, así como con los países garantes (Venezuela, Cuba y Noruega), y ahora están a la espera de la reanudación de la mesa de diálogo en horas de la tarde.
Por su parte, el representante especial del secretario general de la ONU en Colombia, Carlos Ruiz Massieu, manifestó su confianza en que el proceso sea exitoso y agradeció a Venezuela y a los otros países garantes por la organización de este primer ciclo que se mantendrá en Caracas hasta mediados de diciembre.
“Como Naciones Unidas, esperamos que este espacio sea un inicio muy prometedor para un proceso exitoso (…) que Colombia nos demuestre otra vez al mundo que los conflictos se pueden resolver por vía del diálogo”, sostuvo.
Consideró que la pacificación de Colombia es un asunto importante para Latinoamérica y reiteró que la ONU está a disposición de las partes para atender sus requerimientos con el objetivo de concretar la paz.
Además, el monseñor Héctor Fabio Henao, representante de la Conferencia Episcopal de Colombia, calificó el arranque de las conversaciones, congeladas desde 2018, como un “hecho histórico”.
La presencia de la Iglesia católica “tiene un fondo muy particular, que es el de servir y ayudar para que en la mesa haya confianza, para que se avance hacia el logro de la paz en Colombia y de una manera muy clara se vaya produciendo un alivio humanitario para las poblaciones afectadas por el conflicto”, indicó.
Recordó que han acompañado este proceso desde la fase exploratoria, por lo que cree que lo importante ahora es crear las condiciones necesarias para mantener un clima de confianza y apertura.
“Tenemos que buscar acuerdos que permitan las transformaciones sociales y, en el mundo de la democracia, hacia la paz en el país, en las regiones más afectadas, pero en general en toda la nación”, añadió.
EFE