El Gobierno Nacional y la Alcaldía de Bogotá entregaron nuevas alternativas para los vendedores ambulantes, según el alcalde Enrique Peñalosa con esta alternativa se mejorará la cara de la ciudad.
Alrededor de 400 vendedores ambulantes que estaban ubicados en espacios públicos no autorizados de la ciudad, han sido reubicados en sitios en los que según la Alcaldía cambiarían la economía y el aspecto a la capital.
Gladys Valero, directora del Instituto para la Economía Social, IPES, dijo que “la idea es darles oportunidades a los vendedores informales pero de una forma organizada con asistencia técnica de la administración distrital”.
Son más de 100 semiestacionarios, 30 módulos de emprendimientos sociales y otros 30 quioscos solo para aquellas personas que decidieron acatar la orden de no vender en espacios públicos.
Por su parte, según la Alcaldía los únicos que podrán vender en las calles serán aquellos que comercialicen frutas enteras, flores, aguacates y bebidas calientes.