El huracán Melissa golpeó Jamaica como un poderoso sistema de categoría 5, dejando al menos tres muertos y daños generalizados en toda la isla, según informaron las autoridades locales.
Con vientos de hasta 295 km/h y lluvias torrenciales superiores a 70 centímetros, Melissa provocó graves inundaciones, cortes de electricidad que afectaron al 75 % del país y la destrucción de carreteras, viviendas y hospitales, especialmente en las parroquias de St Elizabeth, Westmoreland y Clarendon.
El primer ministro Andrew Holness calificó el impacto como “una catástrofe nacional” y advirtió que las pérdidas podrían superar los 14.000 millones de dólares, cerca del 70 % del PIB de Jamaica. Más de 15.000 personas permanecen en refugios, mientras equipos de rescate trabajan entre fuertes lluvias y carreteras bloqueadas.
El huracán avanza ahora hacia Cuba, donde se han emitido alertas y evacuaciones preventivas. Organismos internacionales, entre ellos la ONU y la Cruz Roja, preparan asistencia humanitaria para la recuperación de Jamaica.
