El astronauta italiano Paolo Nespoli, desde la Estación Espacial Internacional, y el robot humanoide Justin en la Tierra han hecho un experimento para poner a prueba la cooperación entre humanos y máquinas con inteligencia artificial, considerada fundamental para futuras misiones espaciales.
El Centro Aeroespacial Alemán (DLR) informó en un comunicado sobre la prueba realizada el viernes en su sede de Oberpfaffenhofen, donde rollin’Justin -un robot sobre ruedas- recibió las órdenes del astronauta de la Agencia Espacial Europea (ESA), para realizar de forma independiente una serie de tareas.
Esta es la primera vez que un humanoide es controlado desde la Estación Espacial Internacional como si fuera un compañero de trabajo inteligente, y los resultados y datos científicos servirán para futuras misiones en Marte.
Además la tecnología empleada para la colaboración entre humanos y robots puede tener aplicaciones en la Tierra, según la nota del centro alemán.
Nespoli, que llegó a la Estación Espacial el pasado 28 de julio, dijo en un tuit tras el experimento: “¡Esto es lo que la Fuerza puede hacer! Con un poco de ayuda de la tecnología por control remoto, por su supuesto. ¡Sigue adelante rollin’Justin!”, acompañado de un emoticono que ríe.
El experimento SUPVIS Justin perseguía probar la tecnología necesaria para que astronautas que se mantengan en orbita sobre un planeta puedan controlar la acción de robots que esté trabajando en su superficie, reseña Efe.
Nespoli, desde el laboratorio Columbus de la Estación Espacial Internacional, uso una simple tableta para comunicarle a Justin las tareas que debía realizar, de la misma manera que lo haría con un colega humano, pues este dispone de la capacidad necesaria para interpretar y ejecutar ordenes complejas, según la página web del DLR.