“Putin subrayó la especial importancia de respetar la soberanía de Siria y llamó a abstenerse de cualquier acción que desestabilice aún más la situación en ese país y que represente una amenaza para su seguridad”, informó el Kremlin en un comunicado.
La nota destacó que ambos mandatarios abordaron el reciente ataque de la aviación israelí “contra el aeródromo militar sirio de Al Taifur, situado en la provincia de Homs”.
Aunque el Kremlin mantuvo una postura prudente al respecto, la Cancillería convocó ayer al embajador de Israel en el país, Harry Koren, para hablar de la situación en Siria.
Según el Ministerio de Defensa de Rusia, dos aviones israelíes F-15 lanzaron ocho cohetes contra el aeródromo sirio de Al Taifur, varios de los cuales pudieron ser destruidos por la defensa antiaérea siria.
Al menos 14 militares sirios y combatientes aliados murieron en dicho bombardeo, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
El pasado 10 de febrero, aviones israelíes ya habían atacado ese mismo aeropuerto, donde se concentrarían fuerzas del régimen sirio, iraníes y del grupo libanés Hizbulá, reporta Efe.
El Gobierno sirio considera que el bombardeo israelí no hubiera sido posible sin el apoyo de Estados Unidos, según la agencia de noticias oficial SANA.