El grupo Empresas Públicas de Medellín (EPM), dueño de la central hidroeléctrica de Ituango, que está en construcción, advirtió de que la crisis que se vive en la obra, que corre el riesgo de un derrumbe, va para largo.
Así lo manifestó el gerente general de EPM, Jorge Londoño de la Cuesta, quien definió la situación como “seria y compleja” y agregó que desembalsar de forma controlada el río Cauca represado en la obra de la hidroeléctrica tomará “no menos de seis meses”.
“Hoy no tengo una fecha de cuándo dejaríamos de pasar agua por la casa de máquinas porque necesito más información para tomar esa decisión. Lo que sí puedo decir es que no será en las próximas semanas”, afirmó.
Londoño espera que en cinco días se puedan abrir las compuertas del vertedero para evacuar parte del agua del embalse y aliviar así la presión de la presa, y que esperan alcanzar los 415 metros de altura del muro de contención aproximadamente el 7 de junio.
En paralelo a ese trabajo, decenas de obreros se ocuparán durante cerca de dos meses de clausurar con un tapón de concreto un túnel que se venía utilizando para el transporte de material.
El gerente de EPM también respondió a las críticas del gobernador de Antioquia, Luis Pérez, quien anoche denunció “un manoseo de la información” sobre la crisis en la represa y falta de transparencia.
“En ningún momento EPM ha ocultado la gravedad de la situación, todo el mundo es consciente de que la situación no es para nada sencilla, hay complejidad tanto en lo técnico como en la atención social”, aseguró el directivo.