Los familiares de Edwin Dagua Ipia, gobernador del Resguardo Indígena Huellas del municipio de Caloto, en el departamento del Cauca, atribuyeron su asesinato a sectores vinculados con el narcotráfico en esa parte del país.
Así lo expresó a Efe Diego Dagua durante el sepelio de su hermano, una ceremonia acompañada por cientos de personas de la comunidad que rechazaron la violencia que los afecta.
El gobernador indígena fue asesinado el viernes pasado por desconocidos en el caserío La Buitrera, según denunció la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC).
Dagua explicó que su hermano formaba parte de un “frente de trabajo” contra los cultivadores de coca, marihuana, consumidores y vendedores de estas drogas ilícitas.
“Consideramos que las amenazas y los hechos vienen de ese sector”, aseguró a Efe el indígena, quien añadió que sabían de las amenazas de muerte porque su hermano las había comentado con familiares.
La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU en Colombia condenó el asesinato de Dagua y recordó que “Edwin venía del movimiento juvenil indígena”, informa Efe.
Según cifras oficiales, 343 líderes sociales han sido asesinados en Colombia en los últimos dos años, una cifra que varía según las fuentes y que ha generado denuncias de que existe una sistemática en los homicidios.