El presidente, Iván Duque, anunció un “fortalecimiento” de las medidas del Gobierno para aumentar la protección a los líderes sociales amenazados y para “llevar ante la Justicia” a los responsables de dichos crímenes.
Así lo anunció al término de un Consejo de Seguridad en Riohacha, capital del departamento de La Guajira, en la que aseveró que su Gobierno actuará con “determinación y contundencia” para hacer frente a los asesinatos de líderes sociales.
El anuncio de nuevas medidas coincide con la publicación de un informe de la Defensoría del Pueblo, en el que señala que el número de líderes sociales y defensores de derechos humanos asesinados en Colombia en 2018 fue de 172.
Duque apuntó que “los instrumentos de reacción” también se verán reforzados para encarar esta problemática, así como el sistema de alertas tempranas, uno de los mecanismos existentes para prevenir estas violencias.
“Los líderes sociales no pueden ser estigmatizados ni seguir siendo blanco de ataques de los grupos armados ilegales”, manifestó el jefe de Estado.
Entre las medidas anunciadas por el mandatario se encuentra un aumento de las “herramientas de cooperación con la ciudadanía” que permita a las autoridades “llegar a donde están esos culpables y que tengan una sanción severa”.
El presidente colombiano responsabilizó de un elevado número de estas muertes a grupos armados ilegales entre los que se encuentran el Clan del Golfo, Los Pelusos, Los Caparrapos y la guerrilla del Ejército Nacional de Liberación (Eln).
Si bien muchos de estos casos están sin aclarar, Duque mostró su voluntad de aumentar “las capacidades de la Fiscalía, de la mano con la Fuerza Pública, para esclarecer esos crímenes y que no quede ninguno en la impunidad”, informa Efe.
Asimismo, cifró en más de 3.000 los líderes sociales bajo la protección de la Unidad Nacional de Protección (UNP).