Foto: Archivo
El exguerrillero de las Farc Iván Márquez negó este jueves toda la responsabilidad en la masacre indígena que ocurrió el pasado miércoles en el corregimiento de Tacueyó, en Toribío (Cauca).
Por medio de un comunicado, el exjefe de las Farc dijo “ningún acto político de orden militar y menos crímenes como los que se denuncian, con serias preocupaciones por la comunidades de Toribío, Tacueyó y San Francico, han sido cometidos por guerrilleros o milicianos bajo nuestras órdenes dentro del proyecto Farc-EP (Segunda Marquetalia)”.
Igualmente, Márquez y los demás exguerrilleros que se rearmaron afirman su respeto por las comunidades indígenas, sus autoridades, usos y costumbres, también la preservación de sus tradiciones e identidad, al tiempo que el objetivo de restaurar la justicia social y el buen vivir.
En el documento el grupo subversivo explicó que debido al deterioro del acuerdo de paz se vieron obligados a surgir nuevamente como grupo armado, que ahora actúa bajo la sigla Farc-EP (Segunda Marquetalia).
