La junta general de accionistas de Amazon rechazó dos medidas presentadas por un grupo de inversores que pusieron trabas a la venta de las controvertidas técnicas de reconocimiento facial a Gobiernos, redoblando así la apuesta de la compañía por esta tecnología.
La primera de las medidas exigía a la empresa que “pusiera límites” a las ventas de su herramienta de reconocimiento facial Rekognition a cuerpos de Policía, otras agencias de la ley y al Gobierno de EE.UU., mientras que la segunda pedía que grupos de defensa de los derechos humanos y civiles emitiesen un informe independiente sobre la tecnología.
A ambas propuestas se opusieron tanto la Junta de Directores de Amazon como el fundador y consejero delegado de la empresa, Jeff Bezos, y fueron rechazadas en la votación de los accionistas, aunque la compañía no facilitará el número exacto de votos a favor y en contra hasta el viernes.
Las técnicas de reconocimiento facial, que usan inteligencia artificial para identificar a posibles criminales y ayudan en las tareas de búsqueda de menores desaparecidos y a prevenir el fraude documental, han sido duramente criticadas por las organizaciones pro derechos civiles.
Estas aseguran que esta tecnología invade la privacidad de los ciudadanos de forma excesiva, a la vez que puede perpetuar sesgos policiales contra minorías étnicas, ya que se ha probado que tiende más al error con personas de piel oscura.
Un estudio llevado a cabo en julio pasado por la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU, en inglés) halló que el reconocimiento facial había identificado incorrectamente a 28 congresistas de EE.UU. (en su mayoría pertenecientes a minorías étnicas) como criminales al comparar sus fotografías con imágenes policiales.
Además de las dos medidas relativas al reconocimiento facial, los accionistas de Amazon también tumbaron otras 10 propuestas que habían presentado distintos grupos de accionistas, dos de ellas vinculadas a incrementar la lucha contra el cambio climático desde la compañía.Efe