Bolivia anunció que reestructurará su autoridad aeronáutica tras conocer el informe final en Colombia acerca de la tragedia del Chapecoense, en la que murieron 71 personas y que involucró a una empresa aérea boliviana.
En rueda de prensa, el director ejecutivo de la Dirección de Aeronáutica Civil de Bolivia (DGAC), Celier Aparicio Arispe, señaló que dispondrá una “reestructuración”, pero evitó dar detalles tras ser consultado sobre el carácter que tendrá ese proceso.
“Son temas internos que los voy a realizar. Una vez que se tiene el informe final vamos a hacer el análisis correspondiente acá, por eso hablé de reestructurar la Dirección de Aeronáutica Civil”, señaló sin ofrecer más detalle.
El director de la máxima autoridad aeronáutica boliviana leyó un comunicado en el que consideró “una inadecuada toma de decisiones de la administración de la compañía explotadora de la aeronave”, que calificó de inadmisibles al referirse al vuelo de la compañía boliviana Lamia.
Arispe subrayó que la tripulación “mantuvo la fijación de continuar un vuelo con una cantidad de combustible extremadamente limitado”, en concordancia con el informe emitido la semana pasada por la Autoridad Aeronáutica Civil de Colombia, reporta Efe.
La DGAC boliviana responderá en un plazo de sesenta días las recomendaciones que emergieron del informe colombiano relacionadas enmiendas normativas, optimización de manuales, análisis técnicos sobre cuestiones de seguridad, además de otros procesos de control.