La responsable del área de mujer y guerra del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Anne Silvye Linder, considera que uno de los principales problemas que afronta Colombia para reparar a las mujeres que fueron víctimas del conflicto armado es la persistencia de diferentes violencias en el país.
“Son muchas víctimas y (…) ahora hay un desafío grande justamente para recuperar el territorio y la presencia estatal, eso es importante en la medida en que estamos en una época de posacuerdo porque hay violencia, el conflicto no se ha terminado y siguen las afectaciones de hombre y mujeres”, dijo en una entrevista a Efe.
Precisamente, este lunes 19 de junio se conmemora el “Día Internacional para la Eliminación de la Violencia Sexual en los Conflictos”, una conmemoración que este año es especial para Colombia puesto que el martes es el día estipulado para que los guerrilleros de las Farc empiecen a dejar el último 40 % de sus armas.
Las Farc firmaron un acuerdo de paz el pasado 24 de noviembre y su desarme está en la recta final, pero todavía persisten en Colombia otros focos de violencia como la guerrilla del ELN, actualmente en diálogos de paz con el Gobierno, y las bandas herederas del paramilitarismo.
Entre esos últimos destaca el Clan del Golfo, autodenominados en ocasiones como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), la mayor banda criminal del país.
En este sentido, Linder explicó que las mujeres “han sufrido de manera directa e indirecta en el marco del conflicto armado y de la violencia armada”.
“Una de las cosas que causó afectación directa es la violencia sexual, una de las infracciones que más se dirige contra las mujeres, aunque también hay hombres, niños y personas de género diverso (que la sufren)”, subrayó la funcionaria del CICR.
