La visita con el ginecólogo puede ser un tema molesto para algunas mujeres, pero sin duda es fundamental para prevenir problemas de salud y para que todos nuestros planes como por ejemplo, el de un embarazo, se puedan dar sin ningún inconveniente.
Desde el momento en que nos enteramos que vamos a ser madres, todo pasa a un segundo plano y lo primordial resulta ser el adecuado desarrollo de nuestro bebé.
Por eso, si ya tenías un ginecólogo de confianza antes de confirmar que estás esperando un angelito, lo mejor es que continúes en este proceso pues ya tendrán algo de confianza y de la mano de él podrás ir superando tus angustias y dudas.
Aunque algunas mamás deciden cambiar a su especialista cuando su embarazo ya ha avanzado, en Bebé a Bordo te sugerimos no hacerlo ya que es recomendable que sea siempre el mismo doctor quién controle tu estado médico y el adecuado estado de tu bebé a través de las ecografías.
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