Foto: Archivo Referencial
Habitantes de la localidad de Usaquén continúan una dura discusión contra la Secretaria de Ambiente y la constructora Triángulo Dos, debido a que desde el pasado 21 de diciembre se conoció que una palma que lleva más de 100 años en la zona, iba a ser destruída, la conmoción de los vecinos del sector se presentó esta madrugada cuando la acción se dio, vieron cómo este majestuoso icono del barrio Cedro Golf era talado.
Dicho accionar habría correspondido con una alerta por prevención de la comunidad, pues esta palmera podría venirse abajo y generar múltiples lesionados, sin embargo, los mismo vecinos aseguraron que llevan conviviendo con este elemento durante años y que la autorización de esta “mochada” solamente se basa en las quejas que tenía la constructora porque este árbol estaría incomodando el parqueadero de un conjunto residencial.
Según informó una de las residentes del sector, esta acción por parte de la Secretaria de Ambiente, lo que hizo fue saltarse los diálogos que se estaban adelantando, inclusive, pasándose por debajo la ley; sin embargo, la entidad se pronunció asegurando que tenían todos los permisos para que esta talada se pudiera hacer sin incurrir en algún inconveniente jurídico.
“Lo más absurdo es que el edificio se llama ‘Las Palmas’, venden esta propiedad con la promesa de tener dos palmas centenarias como única propiedad para valorizar su inmueble, pero ellos mismos la talán”, señaló una de las habitantes, Ángela Gómez.
La acusación de los habitantes del barrio se encamina en una denuncia por actos de ecocidio, pues ellos aseguran que estaban realizando toda la gestión para que esta palma pudiera ser trasladada hacia otro sector en el que no incomodara o afectara a la comunidad; no obstante, señalan que con la acción de talarla, lo que lograron fue que el árbol muriera, uno que se consideraba patrimonio de esta zona en el norte de Bogotá.
Ahora bien, por parte del Distrito se expresó la subdirectora de Silvicultura Flora y Fauna Silvestre de Bogotá, Claudia Suárez, quien aseguró que la decisión se tomó después de que la constructora Triángulo Dos entregara los planos que certificaban que las redes de gas estaban cruzando muy cerca de las raices de la palmera, por lo que se consideró prudente que el corte de la misma se hiciera para prevenir un accidente en la zona.