El hombre se encontraba atado de pies y manos con cables y cuerdas. Además, sus captores lo golpearon y amenazaron con asesinarlo.
Un hombre, al que sus secuestradores tuvieron atado de pies y manos con cables y cuerdas, fue rescatado por el Ejército en una zona rural del departamento de Antioquia, informó el Ejército.
La operación la realizó el Grupo Antiextorsión y Secuestro (Gaula) en el municipio de Cáceres y atribuyó el secuestro a miembros del Clan del Golfo, la mayor banda criminal el país.
El secuestrado, detalló la información, tenía “golpes en todo su cuerpo, (estaba) desorientado, amarrado de pies y manos con cuerdas y cables, las cuales disminuían la circulación de sangre”.
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Igualmente, el Ejército indicó en un comunicado que el liberado estaba en “pésimas condiciones de salubridad” y que al momento de ser rescatado “esta persona afirmó que iba a ser asesinado” por sus captores.
En esta zona del país un grupo de mineros realiza desde hace dos semanas una protesta y demandan del Gobierno que les reconozca su “actividad ancestral”.
Sin embargo, las autoridades responsabilizan al Clan del Golfo de estar detrás de los desórdenes y brotes de violencia ocurridos durante el paro minero, entre ellos la quema de dos ambulancias.
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A propósito del paro, el Gobierno dijo que volverá a dialogar con los mineros cuando “cesen los hechos de violencia” y se supere el desabastecimiento de alimentos causado por las manifestaciones.
Los manifestantes piden la formalización y reconocimiento de la minería ancestral, un plan para eliminar la burocracia que impide la formalización minera y respeto por el uso de la maquinaria y que no sea destruida por la Fuerza Pública.
El gobernador de Antioquia denunció que el paro está siendo “presionado” por el Clan del Golfo, y que la protesta es una “retaliación” de grupos ilegales por la quema el pasado 1 de marzo de cinco dragas por parte del Ejército y la Policía.