La matrícula mercantil se define como el registro que certifica la real existencia de las empresas y/o negocios, es decir que todas las personas, entidades, empresas o negocios que ejerzan en forma profesional el comercio, deben inscribirse en cuanto su actividad inicie y anualmente deben hacer la respectiva renovación. El plazo máximo para dicho trámite es entonces el próximo 31 de marzo.
“Tan solo durante el primer semestre del 2017, se registraron 323.265 empresas, así lo confirmó la Confederación Colombiana de Cámaras de Comercio (Confecámaras). Sin embargo, hay muchos emprendedores que no formalizan sus empresaspor la cantidad de trámites, la falta de tiempo, las largas filas, el costo y el desconocimiento de esta gestión”, asegura Cristhian Fresen, CEO de DeLeyes.com.
El monto de la multa impuesta por la Superintendencia de Industria y Comercio puede llegar a los 12,5 millones de pesos e incluso puede incurrir en el cierre del establecimiento. En total, la Cámara de Comercio de Bogotá tiene 265.459 registros discriminados en tres categorías y las cifras sobre no renovación de la matrícula, entre 1985 y 1990, es la más alta en los tres grupos.
“No renovar equivale a carecer de registro, luego quien no cumpla con esta obligación de renovar se hará acreedor a tal sanción pecuniaria “, asegura Fresen.
Cabe destacar que legalizar una empresa le da la posibilidad al empresario de contratar con el Estado, acceder a oportunidades de financiación con miras a desarrollar proyectos de gran envergadura, presentarse a los programas de fortalecimiento de INNpulsa, ser parte del programa Compre Colombiano y acceder a otros servicios que el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo y Propaís tienen para los micros y pequeños empresarios formales, además de poder descontar el IVA.
DeLeyes.com además de gestionar el trámite de la legalización de las empresas, se convierte en la solución para impulsar el emprendimiento formal en el país, y de esta manera contribuir con el crecimiento de las Pymes.