Los helicópteros donados por EE.UU. cuentan con una autonomía para dos horas y media de vuelo, con capacidad para 11 pasajeros y 22.000 libras de carga.
Colombia recibió este miércoles los primeros siete helicópteros Black Hawk donados por Estados Unidos que serán destinados a la protección del medioambiente, para luchar contra la deforestación y la tala ilegal en zonas de reserva, y fortalecer la seguridad rural.
De esta forma la Policía fortalece su flota de helicópteros a la espera de que lleguen las cinco naves que restan de la donación de 12 que prometió Estados Unidos.
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Estos helicópteros, entregados a través del Programa de Aviación de la Sección de Asuntos Antinarcóticos y Aplicación de la Ley de EE.UU. cuentan con autonomía para dos horas y media de vuelo, con capacidad para 11 pasajeros y 22.000 libras de carga.
La entrega tuvo lugar en San José del Guaviare, en el centro-sur del país, donde el presidente Gustavo Petro habló de la nueva estrategia del Gobierno, que “se trata de salvar la selva amazónica” e insistió en la importancia de la preservación del medioambiente y del agua. “Si no hay agua, no hay vida y no hay población”, agregó.
“Hay políticos que quieren destruir la selva amazónica bajo la ilusión tonta y estúpida de que al quemarla se forjan haciendas (…) pero entonces, al tener esa tierra que no es fértil, porque la selva se come a sí misma no es por la fertilidad del suelo, vamos construyendo un desierto que acaba con el agua de Colombia”, apostilló el presidente.
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Jonathan Low, jefe del programa de Aviación de INL, aseguró que Estados Unidos “se complace” de entregar estos helicópteros destinados a “proteger la biodiversidad del país, del impacto causado por los delitos ambientales y las actividades como la deforestación, incendios y la tala ilegal”.
Petro se refirió a los departamentos del Guaviare, Putumayo y Caquetá como los principales focos de deforestación actualmente en Colombia y aseguró que “el desarrollo económico está matando la selva”.