Tras el brutal atentado del pasado jueves en la Escuela General Santander, entre los 68 heridos que fueron registrados por las autoridades, se encontraban tres niños que estaban al interior de la institución cuando ocurrió el ataque.
Las autoridades informaron que, de las 68 personas que resultaron heridas 58 ya fueron dadas de alta pues se recuperaron satisfactoriamente del impacto del carro bomba.
Sin embargo, una niña de 3 años, y otros dos menores, resultaron lesionados porque al parecer vivían en las residencias fiscales que están al interior de la Escuela.
De los oficiales que se encuentran hospitalizados, hay dos que están en grave estado de salud, y otros más se encuentran siendo intervenidos quirúrgicamente.