Los goles del portugués Cristiano Ronaldo y del argentino Paulo Dybala, quien marcó en su regreso tras tres meses de baja, hundieron este miércoles al Nápoles (2-1) y relanzaron al Juventus, que alcanzó la tercera posición en solitario de la Serie A.
En un choque directo por la Liga de Campeones, que midió a dos equipos que compartían la cuarta plaza, el Juventus tuvo el mérito de aprovechar sus ocasiones frente a un Nápoles que creó más, pero que se topó con el veterano meta Gianluigi Buffon, decisivo con tres paradas de mérito a sus 43 años.
Andrea Pirlo admitió en la rueda de prensa de la víspera que su Juventus debía mantener alta la concentración y acostumbrarse a una presión distinta, pues con el título casi inalcanzable, era necesario ganar para evitar una debacle histórica como sería quedar fuera de la próxima “Champions”.
Su Juventus no disputó un partido brillante, pero sí supo castigar las indecisiones defensivas del Nápoles. En el 13, Federico Chiesa profundizó por la banda derecha y colgó un centro raso que Cristiano remató para celebrar su vigésima quinta diana del curso.
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Los juventinos protestaron poco después por un penalti a Chiesa y el Nápoles lo hizo por otra pena máxima al polaco Piotr Zielinski. En ambos casos el colegiado debió pitar penalti, pero ni él ni el VAR decidieron hacerlo.
Creció mucho el Nápoles en la reanudación, al ritmo de Lorenzo Insigne, y dispuso de unas buenas oportunidades potenciales, pero no pudo aprovecharlas. Buffon se opuso a unos disparos del nigeriano Victor Osimhen y de Giovanni Di Lorenzo y mantuvo por delante a un Juventus que sentenció el choque en el 73 de la mano de Dybala.
La Joya, que no jugaba desde el 10 de enero, saltó al campo en el 69 por el español Álvaro Morata y en su primera oportunidad superó al meta Alex Meret con un excelente zurdazo curvado.
Aún así, en caso de llegar igualados en la tabla al final de la temporada, el Nápoles estaría por delante por goles en enfrentamiento directo. EFE