Una perrita llamada ‘Prisca’ activó el pasado jueves un campo minado del Eln en zona rural de Toledo, Norte de Santander, cuando una Unidad del Batallón de Operaciones Número 11, de la Fuerza de Tarea Vulcano del Ejército Nacional, planeaba ingresar a la vereda Llana Baja.
En esta zona, días atrás el grupo al margen de la ley había detonado una carga considerable de explosivos contra el oleoducto Caño Limón Coveñas ocasionando un daño ambiental por el derrame de crudo en la quebrada la Llana y el río Catatumbo.
Sin embargo, los uniformados habían descartado presencia de minas en el sector, con una rápida inspección del suelo y estaban a punto de pisar esta zona llena de explosivos, por lo cual enviaron a ‘Prisca’ a que inspeccionara nuevamente el lugar y ocurrió el fatal suceso.
Los soldados reaccionaron de inmediato y evacuaron al animal en un helicóptero Black Hawk logrando llegar hasta un hospital veterinario en Cúcuta, donde intentaron salvarle la vida pero en la madrugada de este viernes no aguantó y murió.
La canina, era una labradora color dorado que prestaba labores hace más de dos años con el Ejército y fue entrenada para detectar explosivos en Norte de Santander.