Mientras el ex fiscal anticorrupción, Gustavo Moreno está a la espera de su extradición hacia EEUU, se recupera y es examinado tras ser mordido por un perro.
Al parecer el atacante de cuatro patas se metió en su sitió de reclusión en una guarnición militar en la que permanece Moreno y lo atacó.
Pese a que luego de incidente, los funcionarios buscaron al can no ha logrado dar con su paradero para determinar si tiene rabia, por su parte Moreno fue sometido a una serie de exámenes con el fin de descartar alguna infección de este tipo.
Según la Revista Semana, al ex funcionario de la Fiscalía le habrían practicado una serie de tratamientos con inyecciones por si el perro tenía rabia.