La Procuraduría General ratificó la dura sanción que le impuso al alcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, esto por presuntas malas conductas durante el ejercicio de su cargo.
La Sala Disciplinaria del organismo, aseguró que Hernández está suspendido de su cargo durante tres meses luego de encontrar pruebas que demostrarían que cometió conductas inadecuadas, tales como agresiones físicas, verbales o injuria en contra de la ciudadanía y servidores públicos.
En el documento del ente de control, se explica que “la medida cautelar impuesta por la Procuraduría Primera Delegada para la Vigilancia Administrativa, en auto del 29 de noviembre de 2018, consistente en la suspensión provisional del cargo del señor alcalde de Bucaramanga Rodolfo Hernández Suárez, por el término de tres meses, sin derecho a remuneración”.
Esta decisión judicial,fue motivada entre otras cosas por la situación que protagonizó con el concejal Jhon Claro, donde supuestamente por una ofensa contra su familia el mandatario le propinó un fuerte golpe y lo agredió verbalmente.
Dicha aclaración de la Procuraduría, se dio porque hace algunos días el alto funcionario aseguró que esta sanción ya había perdido vigencia por tanto seguiría en el cargo hasta ser notificado legalmente.
